
Reflexion de Magda
He estado tomando talleres de oración y una de las sesiones que más me llegó fue la cual muestra la obediencia de María. Cuando se le dijo por el ángel que ella iba a ser engendrada por el Espíritu Santo, ella mostró sólo aceptación; no discutió, no se quejó, no puso sus intereses antes de lo que ordenaba Dios. Ella solo dijo, “Que se haga en mi la voluntad de Dios.” Ella sufrió mucho cuando viό a su único Hijo morir en la cruz, e incluso allí no se quejó, no reclamό, no cuestionó a Dios.
Estoy tratando de vivir en la aceptación de la voluntad de Dios, y aunque es muy difícil, puedo sentir la mano de María en mi hombro cuando estoy luchando por entender el plan de Dios, animándome a seguir adelante, para ver sólo todo lo que Dios me ama, y que cada cosa que pasa en mi vida es para la grandeza de Dios, porque así como María, soy una sierva del Señor.
Magda
He estado tomando talleres de oración y una de las sesiones que más me llegó fue la cual muestra la obediencia de María. Cuando se le dijo por el ángel que ella iba a ser engendrada por el Espíritu Santo, ella mostró sólo aceptación; no discutió, no se quejó, no puso sus intereses antes de lo que ordenaba Dios. Ella solo dijo, “Que se haga en mi la voluntad de Dios.” Ella sufrió mucho cuando viό a su único Hijo morir en la cruz, e incluso allí no se quejó, no reclamό, no cuestionó a Dios.
Estoy tratando de vivir en la aceptación de la voluntad de Dios, y aunque es muy difícil, puedo sentir la mano de María en mi hombro cuando estoy luchando por entender el plan de Dios, animándome a seguir adelante, para ver sólo todo lo que Dios me ama, y que cada cosa que pasa en mi vida es para la grandeza de Dios, porque así como María, soy una sierva del Señor.
Magda