
Una de las experiencias que tuve de María cuando llego a mí, quizás no suene muy dramática, pero fue muy fuerte. Esperaba los resultados de una biopsia, y me encontraba muy tensa esperando lo que podría ser un cáncer maligno. Durante esos días acudí a Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. El muy conocido cuadro de María sosteniendo al niño que corre hacia ella atemorizado porque se le ah mostrado la pasión, En este cuadro el niño está sentado en los brazos de María casi perdiendo su sandalia al correr hasta donde estaba su Madre, y los dos ángeles sosteniendo los instrumentos de su futura tortura. Recordando este cuadro , corrí hacia mi Madre por medio de la oración. Sin que hubiera pasara mucho tiempo, sentí de repente una fuerza de valor y de sumisión para lo que viniera, y me quede con ese sentimiento hasta el día que recibí los resultados. El resultado fue negativo, y me sentía bien, pero todo esto me dejo permanentemente confiando en que mi Madre está siempre conmigo, sosteniendo me en sus brazos.
Ira
Ira